En pleno Paseo de Zorrilla se encuentra El Lucense, un local con más de ochenta años de historia que forma parte de la vida cotidiana de Valladolid. Desde su apertura en 1943 ha sido lugar de encuentro para vecinos y visitantes, conservando el sabor de lo tradicional mientras se adapta a los nuevos tiempos.
Su cocina combina lo mejor de la gastronomía castellana con propuestas actuales: guisos de toda la vida, menús del día, raciones para compartir siempre con algún toque moderno. Todo ello en un ambiente cercano, donde lo importante es disfrutar de la buena mesa.
El espacio es amplio y luminoso, con una terraza reformada en la que se puede desayunar, comer o tomar un vermut.
La entrada está a cota cero, en su interior encontramos mesas altas por lo que recomendamos disfrutar del Lucense en la terraza. Dispone de baño accesible, con puerta corredera de más de 80 cm y barras abatibles a ambos lados del inodoro y espacio suficiente de giro.
Visitar El Lucense es descubrir un pedacito de historia viva de Valladolid, un lugar donde la tradición se sirve a la mesa con naturalidad y sabor.
